Nuevo Centro de Formación y Sede de la Fundación Laboral de la Construcción en Castilla y León, Valladolid

ESTRATEGIA DE GESTIÓN

El IPD arrancó concretando la adaptación del Manual de la FLC al Proyecto en una Matriz de Trazabilidad de Requisitos que serviría de espina dorsal para la definición del alcance en los procesos de diseño y construcción. Otros aspectos destacables del IPD para una adecuada implantación de BIM fueron, entre otras muchas:

• Incorporación del Target Value Design, o diseño contra el Techo Presupuestario.
• Enumeración del Personal Clave, que por supuesto incluía un BIM Manager para el Proyecto, independientemente de qué empresa pagara la nómina de dicho Personal Clave.
• Matriz Integrada de Responsabilidades para todas las fases del contrato.
• Gran peso en la valoración del concurso tanto al Personal Clave como a su grado de comprensión de la metodología propuesta.
• Gran peso en la valoración del concurso a la solución arquitectónica propuesta en respuesta a la Matriz de Trazabilidad, incluyendo valoración del Coste del Ciclo de Vida.
• Transparencia en las comunicaciones, incluyendo un proceso de desarrollo de proyecto y gestión de cambios mediante sistema de libros abiertos.
• Requerimientos BIM y Entorno de Datos Común preestablecidos.

En el desarrollo del Modelo BIM se involucró la FLC a través de CORE, dando lugar a un equipo multidisciplinar que desde el mismo anteproyecto desarrollaron todo la definición del producto en BIM. El Equipo de Diseño para la generación del Modelo estaba compuesto por:

• TCU Arquitectos, como Lead Designer y Estudio de Arquitectura para generación del Modelo y actualizaciones en As-Built.
• Ingeniería Vega, como Ingeniero de Instalaciones para generación del Modelo y actualizaciones en As-Built.
• Grupo Ceteco, como contratista y responsable de las mediciones y cambios en fase de obra.
• ARQTEAM, como BIM Manager del proceso.
• Elena Torrens, como Arquitecto Técnico responsable de las certificaciones.
• Azucena García como Lean Manager responsable de la aplicación de herramientas LEAN en la fase de proyecto y de Construcción.
• CORE, como Project Manager responsable de la definición de requerimientos y auditoría continua del desarrollo del modelo por fases.

La Metodología BIM contribuyó significativamente a la implantación del IPD y sus resultados. El nivel de desarrollo y optimización (medido en relación calidad/precio de la obra), del diseño contribuyó a superar las expectativas de diseño de la FLC, así como a la transparencia en el proceso de cierre de precio y gestión de cambios.

La existencia del Modelo BIM como gemelo real de la obra a construir permitió implantar un sistema de gestión de tareas o incidencias donde las comunicaciones podían girar en torno a una maqueta real de la obra a ejecutar.

La mayor barrera encontrada en la implantación de BIM fue el nivel de madurez de los distintos profesionales así como de la tecnología. El primero fue resuelto a través de una serie de workshops y formaciones a los distintos integrantes del Equipo del Proyecto, permitiendo que todos alcanzaran los mínimos necesarios para hacer su trabajo en entorno BIM. El segundo fue mitigado notablemente a través del uso de OpenBIM, pues no sólo había numerosas empresas colaborando, sino que cada una tenía implantado softwares de distintas casas.

Ante la diversidad de software que los distintos agentes utilizaban, fue necesario diseñar un flujo de trabajo basado en OpenBIM que permitiese garantizar el intercambio de información entres los distintos agentes sin que se perdiese información, pero sobre todo, sin reducir el alcance previsto por la propiedad y siempre con la vista en los objetivos del cliente.

Estos objetivos centrados en la optimización de los plazos y la limitación del coste nos obligaron a centrarnos en el IFC como contenedor de información y geometría, y en el BC3 para garantizar los distintos intercambios de precios.

Se incluye a continuación una serie de lecciones aprendidas:

1. Para un aprovechamiento máximo de la metodología BIM, aunque puede ser recomendable la implantación de contratos colaborativos, estos NO son imprescindibles. La FLC ,independientemente del modelo de contratación, SÍ considero necesario  la incorporación de un agente que, teniendo criterio técnico, tuviera autoridad en el Proyecto. En este caso fue una figura externa contratada por el  Promotor (FLC), representada por CORE.
2. El interés y decisión estratégica sobre el uso de BIM de la FLC y demás empresas participantes fue más relevante que el nivel de madurez BIM de las mismas, afrontando un posible bajo nivel de madurez inicial con formaciones o apoyos puntuales de modelado, en su caso.
3. Sin perjuicio de lo articulado en los contratos, es imprescindible una actitud colaborativa entre el “Personal Clave” a favor del Proyecto.
4. Los Modelos BIM son útiles para el promotor si su nivel de desarrollo permite automatizar las certificaciones en obra, previo automatización de gran parte de las mediciones. La ausencia de este objetivo dificulta la creación de un verdadero “gemelo digital” en torno al cual aunar intereses del “Mundo Tradicional” y el “Mundo BIM”. Se destaca que para que el Usuario Final (sea o no el Promotor) tenga un adecuado As-Built, el objetivo anterior es también relevante. Esto es debido a que la certificación automática del modelo exige un continuo mantenimiento del modelo en obra, incorporando la realidad de esta, y generando un verdadero As-Built.
5. La colaboración se potencia con Entornos de Datos Comunes que permiten gestión de incidencias entorno a “gemelos digitales” de la obra a construir. En este caso se utilizó BIMSync.
6. La utilización del BIM y del LEAN fueron esenciales para alcanzar los objetivos propuestos por la propiedad, y no creemos que hubiese sido posible el uno sin el apoyo del otro. La planificación, el Last Planner, las 5s… sirvieron sin duda para reducir los plazos de ejecución. La simple utilización del BIM 4D no hubiese permitido reducir esos plazos, tan sólo haber tenido conocimiento previo, pero las herramientas LEAN fueron las que permitieron tomar las medidas necesarias para la optimización completa de todos los procesos. Por otro lado, el BIM aportó el conocimiento exacto de mediciones para el control de costes y una herramienta visual para que todas las empresas subcontratadas pudiesen tomar conciencia de la magnitud de su intervención y el momento exacto de su entrada en la obra.